viernes, 16 de junio de 2017

Ante todo, mucha calma. Un relato de La lengua salvada.






«Das deutsche Volk!», vocea Honorio, mientras el exorcista, a pie de cama, quita hierro al asunto ante la esposa: «La concurrencia de factores laborales, el actualizar las cuentas del bufete, le ha abocado a este estado de posesión.
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