martes, 30 de agosto de 2011

Reforma expres

Visto en

¿Es bonito?Centro de acogida en Pamplona, de Javier Larraz



¿Qué os parece para ser un centro de acogida?
A mi me parece bonito para otros usos, pero un poco impersonal para destinarlo a un uso social como este.
Por otra parte el  presupuesto es de 870 euros m y la superficie construida es de 1000 m = 870.000 euros.Con ese dinero ¿las políticas sociales se podrían gestionar mejor ahorrándonos la estética? ¿Qué os parece?

Para un suave despertar: David Gray


domingo, 28 de agosto de 2011

Decisiones drásticas.

Hay días en los que cuando amanece e intentas levantarte de la cama, sientes la boca seca y el pecho oprimido por un suave dolor.
Tienes dificultades para que el oxígeno llegue a tus pulmones y notas que la atmósfera de la habitación está demasiado cargada; incluso cuando enciendes la luz de tu mesilla, parece que te rodea una neblina muy difuminada que te provoca picor en los ojos.
De repente, te doblas sobre ti mismo tumbado en la cama empapado en un sudor frío.
Necesitas beber agua con urgencia porque te atragantas y la tos se reproduce de forma convulsiva.
En ese momento te das cuenta de que tienes algo viscoso que recubre tu faringe y tu traquea llegando hasta los pulmones
Es lo que me ha pasado a mí estos días cada vez que me levantaba.
Hoy por fin he tomado una decisión. Me he levantado y después de beber un café con leche me he tomado un mucolítico.  






       ¡Tengo un catarro que me muero!

Te apetece......cierra los ojos

Via delikatissen
terraza en blanco y azul terraza de madera sofá balancín porche diseño de terrazas diseño de exteriores diseño de balcones decoración mediterránea decoración de exterior balancín en terraza
Domingo por la mañana y escuchando... el sonido de la mar
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Mikel Laboa



A algunos nos sigue emocionando

sábado, 27 de agosto de 2011

Discrepancias

Coherencia

EL HERMANO

– Y entonces te lanzó el puñetazo...

– No tan rápido. No tan rápido. La cosa fue más lenta de lo que tú te piensas. Tuvo su desarrollo. Es verdad que hay golpes que a uno le vienen como llovidos del cielo, sí. Por ejemplo el que le cayó a Durán cuando se puso a cantar a voz en cuello el himno del Atleti en medio del bus repleto de los del otro bando. Esas cosas pasan. Pero lo mío fue de otra manera. Porque de primeras a aquella muchacha ni la miré. Fíjate que luego caí en la cuenta de que tenía una sonrisa angelical, aún con la preocupación, ahí agachada junto a mí, después de calmar al bruto aquél, tendiéndome un pañuelito de papel. Aquello no podía contener para nada el chorretón que se me escapaba del labio, pero fue un detalle por su parte. Y antes de que se alejara con su hombre mono y me rodearan los clientes curiosos, pude ver cómo ella se largaba en retirada, alzada sobre en esos tacones como de
diez metros, meneando sus contornos que parecía que el bar se le quedaba pequeño.

– Algo le dirías...
– Ni mu. Ya te digo que con ella no iba la cosa. Estábamos discutiendo la alineación del día anterior cuando entró aquella bella con su bestia. Ocuparon los taburetes, ahí junto a la esquinita de la barra, donde nos encontrábamos Jaime y yo los lunes.  A ella ni se la veía porque él la tapaba entera con esas espaldas. Sería como alcanzar a ver un diamante detrás de un contenedor de basura. Jaime tenía el día algo apagado, otra vez la úlcera fastidiándole el estómago que se sujetaba con la mano, mientras me discutía el cambio de Segura. Yo le mentaba la madre al míster por no haberlo mandado a descansar mucho antes y Jaime venga llevarme la contraria, pero sin auténtica convicción, como flojo. Me sulfuraba cada vez más y creo que él se sentía como en el cine por cómo me miraba. Me estaba viendo en el cine de tres dimensiones, oye, porque la espalda del hombre mono, con su camisa blanca me hacía de pantalla de fondo, por la que me movía yo de aquí para allá estrangulando al maldito entrenador.
– Nada nuevo me cuentas, la  bronca de todos los lunes, vaya.
– Quieto, quieto. Te cuento, porque he reconstruido la jugada varias veces. Es como la moviola, chico. Me pongo la cámara lenta en el coco y voy ganando en detalles y precisión. Porque justo nada más mentarle la madre al tiparraco ese que no sé qué hace todavía en primera, noto –pero esto solo lo veo en la repetición mental, ya te digo– que el bueno de Jaime me levanta las cejas, tal cual que cuando jugamos al mus. Y debe ser que el mono había lanzado un gruñido. Entonces, sigo explicándole que todo el mundo, desde el taquillero más piojoso del estadio hasta el presidente, sabía de antemano que aquel entrenador no valía su peso en mierda y aquí Jaime –para verle el gesto no necesito recurrir a la moviola–, aquí Jaime se gira dándome el perfil, enseñándome el gancho de la nariz con los pelillos del bigotillo bañados en espuma. Por un instante pienso que debería tomarse un zumo o algo así, que con esa úlcera no puede permitirse comenzar la semana dándole a la cerveza. Y observo que me mira raro, como si no me quisiera mirar o como si me hubiera hecho algo horrible y no se atreviera a enfrentarme. Le digo que a ese entrenador de mala madre por muy de la cantera que sea no se le puede defender, que aunque él sea muy forofo de Segura, no tiene perdón de Dios el no haberle sentado antes en el banquillo; que eso de mantenerle en juego hasta el minuto sesenta y tres no se lo comen ni los cochinos.
– Sí, a tí nunca te gustó el míster, por muy del barrio que fuera toda su familia...
– Escucha, escucha. Que entonces Paco va y me retira la cerveza que aún no me había tomado. Y el Gol no es un bar precisamente amplio, que es como una cajita de cerillas, oye. Muy mono y bien cuidado sí, pero no es como para que Paco se ponga a hacerle feos a la clientela. Y sin dejar de de alucinar con los ojos de Jaime –lo estoy viendo tal cual en mi moviola, bizqueando– me vuelvo hacia Paco y nada, que también me mira rarísimo. Qué se yo, será que me quiere poner una a cuenta de la casa, que la que tenía ya estaba recalentándose, y es que, la verdad, cuando tengo que explicarme, me explico y hasta olvido la sed. Nunca he soportado las injusticias y eso de llegar al minuto sesenta y tres con un solo cambio no hay quien lo aguante. Y todo por un subnormal, que ya es hora de reconocerlo. Y suena un carraspeo a mi espalda. Paco y Jaime, te lo juro, se ponen blancos y reculan. Ahí los estoy viendo, dando un pasito hacia atrás los dos. Raro, muy raro, me digo. Retrocediendo coordinados como dos bailarinas y con los ojos hasta aquí, oye. Y entonces se hace el silencio. Es como en las películas de vaqueros, cuando entra el malo en el saloon en busca de camorra: hasta el locutor de la tele parece que hace una pausa y me mira todo serio desde la repisa.
– Y entonces te enseñó el puño.
– Digamos que no lo llegué ni a ver. Oí otro carraspeo o, mejor, un rugido de gorila. El tipo se giró y pude notar la estela del viento que se revolvió. Como si hubieran encendido un ventilador justo a mi lado. Me entró un frío por la espalda...
– Y,¡zas!, te cayó.
– Y,¡zas!, me cayó. Pero fue algo limpio. Rápido, sin palabras.
– Sobraban, ¿no?, ya las habías dicho tú todas...Yo, te habria sacudido antes.
– Sí, claro, era un asunto de familia, él era su hermano, de eso me enteré después. Y ahí me quedé, tirado en el suelo, mientras el gorila se alejaba con ella por detrás. Ella que me había sonreído preocupada al tenderme el pañuelo. Se fueron y la vi por última vez, subida a aquellos zancos... ¡Qué culo!


©Mikel Aboitiz.  Berlín 12/10/2007

El Increible JUL


Para un suave despertar, preferiblemente acompañad@. Adam Green


lunes, 22 de agosto de 2011

Autoestima y asertividad. Esta última, bonita palabra.

¿Cómo podemos detectar un bajón en nuestra autoestima? Hay varios "síntomas", solo mencionaré algunos:
- Cuando criticamos exageradamente a los demás
- Cuando nos sentimos culpables y desdichados por pequeńos errores
- Cuando necesitamos la aprobación de los otros para valorarnos
- Cuando nos autocriticamos con dureza
- Cuando nos sentimos bloqueados e incapaces de evitar la pasividad
- Cuando nos sentimos superiores a los demás con beligerancia (¡el narcicismo reduce la autoestima, es su antítesis!)


Visto en

Para empezar con fuerza

Deep Purple – Highway Star

sábado, 20 de agosto de 2011

Verdadarius I: lleva su tiempo pero que bueno está.

Llámalo X.
Ingredientes:

Chef Guevara
  • Pan tostado
  • Queso brie           
  • Salsa de fritada de pimientos con tomate
  • Antxoas
  • Mayonesa 
  • Nuez moscada(muy poca)
  • Reducción de módena 
  • Idiazábal rallado
Sobre el pan tostado que os guste colocad por este orden: la fritada con la nuez moscada, el queso brie,la antxoa, dos bolitas de mayonesa casera y el Idiazabal ahumado.
Se gratina unos minutos. El plato se decora con la reducción.(que quita acidez al tomate)

Cuando lo vuelva a hacer os pongo la foto.
(Falsarius para el cuerpo y Verdadarius para el espíritu)



Para un suave despertar



lunes, 15 de agosto de 2011

Para empezar bien el día:Onda Vaga


Heinrich Heine

"En tiempos oscuros, la mejor guía para los pueblos era la religión, del mismo modo que en medio de una noche oscura un ciego es nuestro mejor guía; de noche, él conoce los caminos y senderos mejor de lo que puede verlos un ser humano. Sin embargo, cuando amanece, es una insensatez utilizar a los ciegos como guías."
Heinrich Heine, Gedanken und Einfalle
Finalmente se convirtió al cristianismo

Vía:cerebrosnolavados

domingo, 14 de agosto de 2011

Tutorial Photoshop

dZoom, Pasión por la fotografía                                                                                     http://www.dzoom.org.es/noticia-1602.html                                                                                                                                                                    
En este enlace os dejo un buen tutorial para editar con Photoshop.
Se trata de distintos virados en blanco y negro .
Os dejo un ejemplo propio.






Haití

http://www.ayudahaiti.es/

Para empezar bien el día: Asa


viernes, 12 de agosto de 2011

Crisis bursátil



             Vía   http://fiume26.blogspot.com 

Unamuno

No es la coincidencia lo que nos mantiene unidos sino la conversación, decía Unamuno.






Gracias, Germán.


ES LA PRIMERA

GILTZERO significa llavero en mi familia, y este blog pretende ser la llave que abra "mis cosas" a los demás y que recoja las llaves de los demás para que yo pueda ver "sus cosas".


Gorriones en el patio de mi casa